Abrí el diario por la última página
escrita, leí lo último que tenía escrito y lloré mucho más. Empecé a escribir
sobre como conocí a Selene, la prima de Carlos, mi mejor amigo:
Recuerdo que la conocí hace 4 años, mejor
dicho hace 4 veranos. Estábamos mis
amigas, mi ligue de aquel verano y yo. Carlos apareció con Selene en la playa
de Orzán. Nos presentó a su prima, me cayó bien desde el principio. Lo que más
gracia me hizo de aquel día fue cuando dijo que no le presentaba a Ignacio
porque no sabía si él y yo íbamos a durar.
-
Te quiero
por cómo eres, pero no dejes al pobre sin presentar- le dije a Carlos muy seria
por aquel momento.
-
Porque si
luego lo dejas tendré que decírselo todo a Selene y en ingles no se me da muy
bien- me dijo de tal manera que acepté de una manera que a Ignacio no le gustó
nada.
Nos contó Carlos cosas sobre Selene, que era
de Los Ángeles, que su madre era gallega y su padre americano. También nos dijo
que tenía nuestra edad, que sabía algo de castellano, por eso iba a venir desde
ese año el mes de agosto para practicarlo y también nos dijo que él se iba a ir
también a practicar inglés en el mes de julio de los siguientes años a Los
Ángeles.
Le conté cosas de tal manera que Laura se
empezó a mosquear, por eso a Laura no le cae bien actualmente.
Dejé de escribir un momento, vi la
hora que era, decidí llamar a Paula o Anastasia a ver como se había
solucionado. Ninguna me contestó, así que llamé a Carlos, me contestó enseguida.
-
Por tu culpa Selene está llorando a moco tendido
en mi cama- me dijo en bajito para que Selene no escuchara nada. Mientras yo
escuchaba por detrás a Selene llorar a moco tendido.
-
Yo lo siento,
pero no podía estar un año sin saber con quién salir en cada momento por
no defraudar a nadie- le dije sintiendo muy culpable por todo lo que estaba a
pasar con Selene y Laura- ¿fue muy grande su bronca?
-
Pues imagínate para que Selene esté llorando por
culpa de que casi Laura le pega en medio de la plaza- empezó a decir Carlos,
cada vez me había sentir más culpable y por
eso empecé a llorar para que todo se solucionara- ahora no llores tú, que con
una me llega y me basta.
-
Bueno mira, esto no hubiera pasado si se
hubieran llevado bien desde el principio. Culpa mía es ahora, pero desde
siempre fue de Laura- le aclaré sollozando.
Terminé la
llamada, ya que no tenía ganas ahora de cabrearme con mi mejor amigo. En menos
de 1 minuto mi móvil sonó, miré quien era, cuando vi que era Paula contesté al momento.
-
¿Qué quieres Sofía?- me preguntó no muy
convencida de haber contestado Paula.
-
Pues saber que ha pasado entre Laura y Selene y
saber cómo está Laura.
-
Pues como crees que está. Está muy dolorida por
todo, casi pega en mitad de la plaza a Selene- me comentó Anastasia cabreada-
por tú culpa está mal.
-
No es solo mi culpa, si le hubiera dado una
oportunidad cuando la conocimos, a lo mejor se hubieran hecho amigas y ahora no
estarían así- les dije cabreándome y
llorando a la vez.
-
No llores, sentimos echarte a ti la culpa, pero
es que tú te fuiste para que arreglaran todo- me dijeron de tal manera que
seguí llorando- no estés triste, la culpa no te la echamos a ti, si alguien
tiene la culpa como tu dijiste es Laura
que no se la quiso como amiga desde el principio.
-
Gracias chicas
por decirme que no tengo la culpa. Carlos me dijo que si tenía la culpa y me
dijo que no llorara- les conté de tal manera que me dijeron que en media hora
si podían, se pasaban por mi casa. Le pregunté a mi madre si les dejaba subir
un momento en media hora para un par de cosa que íbamos hacer el sábado. Al
principio no aceptó mucho, pero luego dijo que solo podían quedarse media hora
y luego se tendrían que ir.
Estaba nerviosa
desde que había cortado la llamada esperando a que Anastasia y Paula vinieran a
mi casa. Llegaron cuando dijeron que iban a venir. Les dije que solo podían
quedarse media hora y aceptaron. Fuimos a mi habitación, donde cerré la puerta
y nos sentamos en mi cama y en la silla.
-
Bueno
ahora que estamos las 3 podemos hablar tranquilamente- empezó a decir
Paula ya que Anastasia y yo no sabíamos que decir.
-
Si, podemos hablar sobre Laura y Selene. No
pueden seguir toda la vida enfadadas- dije yo. Pero ellas me miraron con cara
de y Bárbara y tú- lo de Bárbara y yo es diferente. Ella se portó mal conmigo
desde el principio. ¿Recordáis el video que subió a Youtube de la fiesta de
cumpleaños de Rubén en el que se veía a todo el mundo y sobre todo se nos veía
a Rubén y a mí besándonos muy apasionadamente?
Asintieron,
cogieron mi ordenador y teclearon las palabras necesarias en Youtube para ver
si seguía el video. No estaba, así que me sentí un poco aliviada.
-
Vale, lo tuyo con Bárbara es diferente. ¿Qué fue
lo que hizo que Laura odiara a Selene? -
preguntó Paula a ver si Anastasia o yo sabíamos algo.
-
Fue por mi culpa, que mientras estaba Selene en
la ciudad, no le hacía caso a ella por eso creo que no le cae bien- dije
mientras ellas lo iban asimilando- también porque muchas veces he hablando con
Selene cuando estábamos juntas en mi Blackberry.
-
Pues ahora lo que deberías de hacer es ir mañana
a su casa y a pedirle disculpas a Laura y que este año mientras esté Selene
aquí no vas a dejarla de lado.
Asentí, le mandé
un mensaje a Laura diciendo que mañana íbamos a quedar ella y yo solas a dar una
vuelta y que yo la invitaba a donde quisiera para demostrarle mi amistad y que
no le iba a dejar nunca de lado por nadie.
Me contestó al segundo, pero no es
mensaje sino en una llamada. Puse el manos libres para que Paula y Anastasia
escucharan también.
Laura: Gracias
Sofía, pero no sé como perdonarte lo que
ha pasado hoy.
Yo: Anda
perdóname por toda nuestra amistad y por todos los buenos ratos que hemos
pasado juntas.
Laura: Bueno eso
es verdad, somos las mejores amigas desde que tenemos memoria. Bueno, te
perdono porque sé que mañana harás que sea un gran día tú y yo solas.
Yo: Claro mañana
estaremos tú y yo solas en el centro o donde tú prefieras.
Laura: En el
centro está bien, quedaremos mañana a las 5 en punto, ni un minuto antes ni un
minuto después. Iremos primero a la yogurtería, luego a beber algo a la
cafetería de siempre y por último a cenar al restaurante donde vamos siempre y
que hay 3 en el centro.
Pensé que todo eso sería pedir
demasiado dinero, pero le iba a decir una pequeña mentira a mi padre para que
me dejara bastante dinero.
Yo: Vale,
haremos eso si es lo que tú quieres, hasta mañana mejor amiga.
Laura: Hasta
mañana mejor amiga, te perdonaré si haces todo lo que he pedido que hicieras
conmigo.
Terminé la llamada, en el momento
que era hora de que se fueran Anastasia y Paula.
-
Nosotras nos tenemos que ir, pero pasado mañana
cuéntanos con todo detalle lo que ha pasado en la salida tuya con Laura- me
dijo Paula saliendo de mi habitación seguida de Anastasia, asentí. No podía
creer que todo se fuera a solucionar en menos de 48 horas.
Me quedé en mi
habitación, esperando a que se fueran y mi madre nos llamara a cenar. Cuando
fui a cenar, vi que mi madre había preparado arroz y filetes de pollo o
ternera. Solo me serví un poco de arroz y una cuarta parte de un filete de
pollo. Terminé la primera en cenar y me marché a la habitación después de
lavarme los dientes.
Mi madre vino a mi habitación a
preguntarme porque no había cenado como siempre, le dije que no tenía mucha
hambre que había tomado algo antes en la calle y no tenía más hambre.
Se lo creyó de una manera no muy
convencida, pero al final me dejó en paz. Para que pudiera relajarme antes de
dormir. Estaba nerviosa por lo que mañana iba a pasar con Laura y por cómo le
iba a pedir a mi padre más dinero de lo habitual.
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